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Cuando nada podía ir peor… me hice autónomo

Hay momentos en los que todo parece que te sale del revés.  Lo has dejado con tu pareja, en el trabajo te machacan, tus amigos ya no salen como antes y físicamente… mejor no hablamos. Con la falta de sueño, el stress, la gastritis y cistitis … estoy hech@ un cromo. Entonces piensas: "Esto no puede ir a peor". Y claro, la vida, con su fino sentido del humor, te guiña un ojo y te responde: "A que sí."

Y en ese momento de lucidez máxima, tomas la decisión de tu vida: “ME HAGO AUTONOMO” ¿Qué podría salir mal? ¿Verdad? No es que sea mi mejor año, pero tal vez agregar un poco de emoción, a esta montaña rusa de sentimientos me siente bien… Esta es la historia de muchos emprendedores.

Autónomo, bonita palabra que evoca imágenes de libertad, trabajar en pijama, viajes por todo el mundo, horarios flexibles.!! ¡Maravilloso, justo lo que necesito!!

Solo que el primer trimestre, descubres que flexibilidad es trabajar 24/7 y los viajes son: ordenador, curso, clientes, gestor y vuelta a empezar.

De repente, te das cuenta de que antes tenías vacaciones y ahora el fin de semana lo utilizas para ponerte al día de todo lo que no te dio tiempo entre semana.

 

Lo más curioso es que, a medida que avanza este viaje del autónomo, empiezas a convertirte en una especie de superhéroe del multitasking.

9:00 eres community manager navegando por las redes.

10:00 jefe de ventas negociando con clientes.

12:45 contable.

A última hora te empoderas con Canva te haces diseñador gráfico.

 

Y aquí está el verdadero truco: la resiliencia con una sonrisa.

Esto no es solo un trabajo, es un estilo de vida. Por extraño que parezca después de lo que te he contado, pasado el primer año ni te planteas trabajar para otro.

Porque, si hay algo que aprendes en este camino, es que el éxito no es la ausencia de problemas, sino la capacidad de superarlos con paciencia, humor y buenos compañeros de viaje.

Así que, si piensas que nada puede ir peor, recuerda, podrías hacerte autónomo.

 

Después de casi diez años,  te puedo decir que no ha habido ni un solo día, en el que me planteara otra cosa que no sea esto.

Además, hay algo que nadie dice sobre el emprendimiento. Cuando seamos mayores tendremos mil historias legendarias que contar, siempre con una sonrisa.

 

Tanto si has decidido emprender ahora, como si llevas tiempo con tu empresa recuerda siempre:

Si no te cuidas tu no estas cuidando tu empresa.

No desesperes no es el camino fácil, pero si te cuidas, puede ser increíble.

 

info@tuzonacoaching.com

Si tu quieres te acompaño.

 

 

 

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